Un poco más adelante alcanzaron un ribazo que descendía hasta un río.

Los frentes del ribazo detuvieron la inundación de los campos de centeno.

Entretanto, ya el tropel del peonaje se había disgregado por el ribazo.

En ese sitio la tierra estaba blanda por la humedad del ribazo.

Al final llegaron a la empalizada y descansaron junto al maloliente ribazo.

No llegaron a verlo hasta que no alcanzaban el borde del ribazo.

Pero se resarció cuando ambos estuvieron sentados en el ribazo del Nyad.

Quizás pudiera arrastrar al animal sobre el ribazo helado, hasta los arcos.

Sin esperar a decidirse, bajó del ribazo y entró en el arroyo.

Se mantenían pegados al ribazo y la arena blanda amortiguaba sus pasos.

Las ramas de un arbusto del ribazo arañaron la ventanilla de Julie.

Susana se hallaba tendida sobre un ribazo, a la orilla del río.

Un ribazo serpenteante atropellado de exclusas discurría en paralelo a la pista.

Las gallinas corrían por entre las brozas del ribazo siguiendo la barca.

Les hizo cruzar un ribazo rocoso y descender por la ladera posterior.

Santos y Tito se alejaron hacia unos matorrales, al pie del ribazo.