Hace una pausa y con voz entrecortada pide una tacita de café.

Junto a la centelleante pantalla del ordenador había una tacita de café.

Si podemos, compramos una tacita de café, que nos mata el hambre.

Caminaba cuidadosamente, mirando la tacita de café que llevaba en la mano.

Barbara Belli apoya la tacita de café sobre la mesa que tiene enfrente.

Mercedes acudió a la mesa con la tacita de café en una bandeja.

La señora tenía una tacita de café prendida entre sus dedos.

Una tacita de café enlozada restalló al caer de una estantería.

En Cuba casi todos gustan de saborear una tacita de café.

Se detuvo y sacudió la ceniza del cigarro en la tacita de café.

El camarero volvió y le colocó la tacita de café delante.

Martina estaba sentada sobre ella, con una tacita de café en las manos.

La señora Saeki deja en el plato la tacita de café.

Tiró el cigarrillo en la tacita de café que tenía en las manos.

Pero, ¿qué tal si antes nos tomamos una tacita de café?

Y una vez ante el mostrador, pidió una tacita de café.