Estaba tan abrumado por el pesar que poco más pudo añadir Sylvia.

Ninguno de los doce estaba tan abrumado y abatido como Simón Pedro.

Se sintió tan abrumado que, aunque hubiese querido, no habría podido hablar.

Me sentí tan abrumado que estuve a punto de levantarme y marcharme.

Creo que estaba tan abrumado como yo por el resplandor de Susanne.

Estaba tan abrumado por el dolor que deseaba seguirla al otro mundo.

Perseo estaba tan abrumado que quiso darle un abrazo, pero Atenea retrocedió.

Lo vimos tan abrumado que, olvidados de la elección, le imaginamos enfermo.

Parecía tan inseguro, tan abrumado por las emociones... Le leí el pensamiento.

El comisario se sentía tan abrumado que solo acertaba a tartamudear palabras sueltas.

Broud se había sentido tan abrumado por su retorno como todos los demás.

Estaba tan abrumado por aquella perspectiva que se limitó a decir con tristeza:

Me sentí tan abrumado que era incapaz de hablar sobre ello.

Pero estaba evidentemente riéndose, tan abrumado por el regocijo que parecía casi histérico.

Cuando salimos de la sala me sentía tan abrumado que no podía hablar.

Korolev sintió una punzada de compasión por aquel hombre de aspecto tan abrumado.