Me fuerzo a tragar la bilis que me sube por la garganta.

Sonrió con la malicia que le proporcionaba tragar la bilis del diablo.

Ceniza Blanca intentó tragar la bilis que se le agolpaba en la garganta.

Engersol trató de tragar la bilis que le subía por la garganta, amenazando ahogarlo.

Aceptaron, naturalmente, y yo me tuve que tragar la bilis que me subía por la garganta.

Así que había optado por mantener la calma y tragar la bilis, que la corroía por dentro.

Hice una pausa para tragar la bilis.

Eso no me facilitaba en lo más mínimo tragar la bilis que se me acumulaba en la garganta.

Apenas logró tragar la bilis.

Ella sabía lo suficiente como para seguir su instinto y tragar la bilis que se le acumulaba en la garganta.

Traté de tragar la bilis que se me agolpaba en la garganta, pero, por más que salivaba, no había forma de pasarla.

Cómo le odiaba, se había tenido que tragar la bilis para soportar su presencia altanera y orgullosa aquellos años para poder estar cerca de Nicole.

Y Juan no pudo hacer nada, salvo agachar la cabeza y tragar la bilis, porque Ricardo todavía no tenía heredero y todo estaba en juego.

Sin embargo, se tragó la bilis que le subía por la garganta.

Lo siento -exclamotragando la bilis que me produce su patética interpretación.

Me trago la bilis mientras Luke pisa con fuerza a mi lado.