Los demás podrían ayudar a tranquilizar los ánimos y continuar como antes.

Nada de eso servía, sin embargo, para tranquilizar los ánimos de ambos.

Pero Arzaky se puso de pie, para tranquilizar los ánimos: nación juvenil.

Tampoco ayuda a tranquilizar los ánimos la aparición de otro enemigo: el invierno.

Las raciones dadas por Ezra contribuyeron a tranquilizar los ánimos por el momento.

Escuché sus primeras palabras, que solían tranquilizar los ánimos más inquietos.

Pero esto, con ser efectivo, no había contribuido precisamente a tranquilizar los ánimos.

Llegó al extremo de sugerirme que buscara la manera de tranquilizar los ánimos.

Cualquiera de ellos nos ayudaría a sanar y tranquilizar los ánimos.

Solía encender incienso para purificar el cuarto y tranquilizar los ánimos.

Aquella sonrisa solo pretendía tranquilizar los ánimos de la mujer, pero los encendió-

Uno, tranquilizar los ánimos sombríos y evitar así discusiones estúpidas.

En realidad, esto no había contribuido a tranquilizar los ánimos.

No tenemos una estrategia para tranquilizar los ánimos de opositores.

Benedetto Capello tomó la palabra entonces para tranquilizar los ánimos:

Estas montañas no están hechas, precisamente, para tranquilizar los ánimos.