Se pusieron de pie y los llevaron hacia la trastienda del bar.

En la trastienda del bar esa noche ya no estaba la niña.

Entretanto, Irene Salvat había subido a un altillo en la trastienda del bar.

Al poco, vio salir a Paco de la trastienda del bar.

En la trastienda del bar un joven negro se afanaba entre ruido de platos calientes.

Lo condujo a la trastienda del bar, donde había una mesa con cubiertos para una persona.

Me desperté mucho más tarde en un sillón tapizado de rojo en la trastienda del bar.

Sin ni siquiera preguntarle el precio, entro con ella a un reservado en la trastienda del bar.

Vivía en la trastienda del bar y se ganaba la vida trenzando pequeños encantamientos de protección y suerte.

Soy el capullo que la dejó esperando mientras se acostaba con Christel en la maldita trastienda del bar.

En la trastienda del bar había varios jamones y numerosas bolsas de patatas fritas, latas de aceitunas y similares.

Brubaker obedeció, y al cabo de unos instantes nos encontrábamos en su modesta vivienda en la trastienda del bar.

Fat Vince y yo ya nos hemos enfrentado: tuvimos nuestra llorera con¬junta en la trastienda del bar da billares.

Por la trastienda del bar de Celestino Ortiz pasó como un ángel que levantase un huracán con las alas.

Los cafés de madrugada, la trastienda del bar, la compañía de un amigo iluminado que quería él solo fundar un partido ecologista.

Estaba en la trastienda del bar, entraba y salía cuando le daba la gana, ya sabes que era una gata muy independiente.