El tremuloso sacudón la dejó un rato inmóvil, al tiempo que sus pupilas se dilataban sin piedad.

Empujó Rita la puerta con recelo, cautelosamente, y vio en un cuarto hondo y destartalado una cama estremecida por un cuerpo tremuloso.

Sé que estoy un poco tremuloso, pero - yañadióun proverbio que ya había caído en el olvido-"la experiencia es como una tercera pierna".

Alargando el brazo, Jordan encendió el campímetro con su tremulosa mano.

Era una sensación muy extraña tener las aguas del lago moviéndose tremulosas a ambos lados.

Sentía una tremulosa presión en las meninges que le obligaba a centrar la visión a menudo.

Ella le devolvió la sonrisa, tremulosa.

-Enpie -ordenóel señor director, con voz tremulosa, todavía poco acostumbrada a mandar.

-Recuerdoaquel día infortunado -manifestóDrizzt, con voz tremulosa-

-Eresun repugnante mariconazo -empezóAlastair con simpatía, blandiendo un tremuloso índice en las narices de Quilley-

El suelo de madera brillaba, perfectamente encerado, y una luz tremulosa a causa de la lluvia entraba a raudales a través de las lunas antiguas.