1
Jemima se concretó a mirarla con aire zahareño por encima del hombro.
2
Él movió la avutarda y la colocó más cerca del zahareño.
3
Siempre había alimentado a su zahareño con una sola ración diaria.
4
El halconero llevaba el zahareño en la mano derecha, parecía aprensivo.
5
Wayland llevaba al zahareño en su jaula colgando de la silla.
6
Aunque era manso, aquel pájaro no tenía tan buenos modales como el zahareño.
7
Después de cerrar la puerta, se enfrentó Stephen con aquel zahareño sin cuello:
8
El zahareño blanco todavía tenía buen apetito y los ojos alerta.
9
Apareció un hombre alto, vigoroso, de semblante zahareño, apasionado y trágico.
10
Prefiero ver esa joven bizantina, de aspecto zahareño, que un poco más allá diviso.
11
A Rafael le tenían por zahareño; le trataban bien porque lo había llevado Celestino Escobar.
12
El zahareño había terminado de desplumar y empezaba a abrir el pecho de la avutarda.
13
Fue cabalgando con un ojo puesto en el zahareño.
14
Una mirada hacia arriba le reveló que el zahareño ni siquiera había visto el señuelo.
15
El zahareño describía pequeños y atentos círculos por encima.
16
Avanzó unos pocos pies y el zahareño emitió un "cack" ansioso detrás de él.