Solo quería ser un espectador pasivo, sin l amar mucho la atención.

Creo que, para enfadarte tanto, tienes que amar mucho a una persona.

Debió de amar mucho a aquella mujer, pues no buscó a otra.

Tenía que amar mucho y... Bueno, de aquello era mejor no hablar.

Decía que Ruyra debió amar mucho el mar y los bosques.

Pero parecía amar mucho a Jonathan y estar ilusionada por su futuro juntos.

Pero lo más importante era que parecía amar mucho a Patricia.

Asimismo, hay que amar mucho la vida para amar todavía más la muerte.

Es preciso amar mucho para pasar por encima de semejante dificultad.

Creo que has de amar mucho tu trabajo para arriesgarte tanto.

Ella me enseñó una forma de amar mucho más sana, pura y profunda.

Hay que amar mucho a una persona para arriesgarse a padecer.

Quería amar mucho y ya lo ha conseguido, pero ¿para qué?

Feliz es, por tanto, el que tiene capacidad de amar mucho.

Tuvo que amar mucho para despertar tanto amor a su alrededor.

Podés amar mucho a una persona e ir a la cama con otra.