Una balda de madera contenía varios libros, y no se veía nada más.

Solo disponía de una balda de madera en la parte interior.

Abajo, sobre una balda de madera, unos cuantos pares de zapatos muy gastados.

Bajo los cuadros, hay una desvencijada balda de madera y, sobre ella, flores y velas.

Se sentó en la balda de madera medio podrida y esperó a que Rosales se sentara enfrente.

Justo debajo del espejo hay una balda de madera sobre la que descansa una navaja de afeitar.

Miré al otro lado de la habitación, a una balda de madera que había sobre el hogar.

Tomó un reloj de arena que descansaba en una balda de madera y le dio la vuelta-

Con una cortesía exquisita, me ayudó a colocar mi equipaje sobre la balda de madera que coronaba los asientos.

Estaba colocada en una balda de madera sobre un cubo lleno de agua gris y una gran cantidad de amoniaco.

Utilizaban un trapo para contener la hemorragia mientras explicaban que la balda de madera desprendida de un archivador le había golpeado.

Afianzó la otra punta al sólido barrote de una balda de madera que sostenía un pequeño espejo de respaldo de plata.

Sin prestar atención a Naomi, la mujer se acercó a una balda de madera con una lata grande de leche en polvo.

Al menos las toallas parecen limpias y hay dos botecitos de gel y de champú encima de una balda de madera, sin estrenar.

Tan solo una pequeña balda de madera y una silla desvencijada componían el resto del dormitorio donde parecía haberse instalado Díaz de Rada.

Más abajo, en la ancha balda de madera inferior, descubro un montón enorme de ejemplares de mi libro, azul y agua y verde musgo.