Además, desarrollan actividades informales: el concho, puestos de fritura y pequeños negocios.

Yo lo veo muy bien, porque el transporte de concho es denigrante.

En la recepción había cinco sillones concho de vino con tapetes rotos.

El concho se empleaba luego para abonar las berzas y los espárragos.

Sé que estoy en mi última etapa y quiero aprovecharla a concho.

Verónica Cray caminó rápidamente por el estrecho sendero a través del castañar.

Subimos lentamente a Roncesvalles: hayedos, prados, carballeiras, xesteiras, abedules, un enorme castañar.

Este viejo de la linde del castañar, en su vida destripó terrones.

Quería preguntar a éstas, y crucé con ese objeto un ala del castañar.

Después de hecho esto, fue colocando sus veinticinco hombres en un castañar próximo.

En el hoyo había una roca muy grande y un castañal viejo.

Las llamas se habían extendido por la seca árgoma y amenazaban el castañal.

Era domingo; por la tarde bailarían en el castañal; y con la presa, no había de faltar vino para remojar la gorja.

Vamos a aquellos castaños -indicóel Moro con el mentón el castañal que se extendía más adelante, a la vera del camino.

A una revuelta de la carretera empezó a emerger, de la ramazón tupida del castañal el alminar de las torres de Alborada.

Era un morso, largo como de cuatro metros, con un diámetro de tres, cubierto de pelo corto, escaso y de un rubio rojizo.

Y estos tres que tengo estirados delante de mí son morsos.

El mar estaba lleno de peces y ofrecía grandes mamíferos marinos, focas y morsas.

Quiero cazar osos polares y morsas cuando sea posible.

Los balleneros lo han extinguido todo, hasta los morsos.

Caminaron bajo la tibieza del sol de otoño hasta la colina donde se erguía un antiguo castaño silvestre.

Castaños silvestres dan sombra al camino, y nosotros bajamos las ramas para recoger los espinosos frutos.

Tela marrón, el marrón de las hojas secas de los castaños silvestres, con lunaritos encarnados, y cinturón violeta oscuro.

Convivir con su hija y su nieto hace que sus viajes parezcan las púas de los castaños silvestres: meras protuberancias.

Flanqueados por castaños silvestres y plátanos, los paseantes parecían ejecutar los movimientos mecánicos y rituales de las figuras de un reloj.

Manzanos, castaños bravos, avellanos, nogales, robles y texos inundaban las laderas sembradas de ganzo y argoma, todo uniformado de blanco.

Mientras comían hablaron del puente del Día del Trabajo, de las diferencias entre castaños reales y castaños de Indias.

A Ana Belén Mota y Noelia Castañeiro, mis chicas Paraíso, gracias por aparecer en mi vida, sois la leche.

Eran castaños , salvajes y redondos como los de un búho.

Los cocidos de Filomena eran cada día más claros y escuetos y, al concluirse las castañas pilongas, había sido preciso comer las regoldanas.

Marrón glacé, castaño común con un toque ligero de plata.

Mis cabellos son de un castaño común; mis ojos, demasiado gatunos; soy demasiado alta, demasiado franca.

Su rostro era ovalado, y sus ojos y cabello -quele llegaba hasta los hombros-de un castaño común.

Los ostiones, molsos y lenes moluscos insulsos, en un frasco.