1
El jacarandoso guajirito y sus andanzas tuvieron un espacio en la televisión.
2
Antonio, tan buen mozo y tan jacarandoso, le causaba una repugnancia invencible.
3
El mozo, antes de partirse, preguntó muy jacarandoso sobre su caballería:
4
Entró en casa como una peonza de carne, jacarandoso y ebrio de coquetería.
5
Nomás faltaba que tú también me dijeras lo que debo hacer, enano jacarandoso.
6
La música les despidió con un son abajeño jacarandoso y locuaz.
7
Estaba muy bonito, jacarandoso en la sonrisa, lo bastante conservado por el frío.
8
Necesito poner distancia entre mi hermoso cuerpo jacarandoso y esta ciudad.
9
Un mozo viejo, gitano, jacarandoso, trae los cubiertos, el vino y las aceitunas.
10
Le costó reparar en que su progenitor no se había contagiado del ambiente jacarandoso.
11
Más lejos, el portante ágil y jacarandoso del campesino andaluz.
12
Todo un jacarandoso batiburrillo con el que había pretendido impresionarles.
13
Después, la expresión de su voz cambió a un tono alegre y jacarandoso y dijo:
14
Era éste jacarandoso, petulante, hablador, mentiroso; tenía una bonita voz y cantaba romanas al piano.
15
El uniformado le cruzó la cara; volvióse, jacarandoso, escupiendo:
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Caminó hacia el interior de la casa, taconeando, con paso sorprendentemente ágil, con andar jacarandoso.