Trozos de bastón roto quedaron señalando el campo durante muchos meses después.

Cuando ya estaba mareada, se detuvo tambaleante y extendió un brazo, y sus dedos quedaron señalando hacia el este.

En el trayecto descendente, sus pies perdieron contacto con el suelo y finalmente quedaron señalando hacia la pared del lado contrario.

-Tiberiolevantó los brazos en dirección al cielo y, a continuación, dobló los codos hasta que ambas manos quedaron señalando la cabeza.