Sí, eres tan remiso como una vieja y tan tímido como una virgen.

Aquello bien podía ser el motivo de que Cervantes estuviera tan remiso a hablar.

Menuda pareja hacían: él, tan remiso a ofrecer consuelo y ella tan reacia a aceptarlo.

No conozco en parte alguna pastor tan remiso

Si os hubierais mostrado tan remiso en Malinas, yo ya no me encontraría entre los vivos.

Este era tan remiso como antes la sonrisa.

Pero ningún animal era tan remiso a dejarse capturar como el zorro, con la excepción, naturalmente, del glotón.

Por cierto, ya estoy informado de las andanzas de ese inquisidor sobre el que te mostrabas tan remiso a hablarme.

Aquiles era tan remiso a volver a separarse de Patroclo, que por un tiempo pareció que ni siquiera se iría.

No sé, a veces me parece que no era tan remiso como todo esto, y de caballos entendía un rato...".

Las cosas han sido difíciles con Lewis siempre tan remiso con la manutención y todas estas cosas, y todavía no he levantado cabeza.

Pero Eduardo no había sido tan remiso como ella; había reconocido su obligación hacia un leal servidor de Edmundo y la Casa de York.

Según esa historia, Odiseo era tan remiso a ir a la guerra que quiso engañar a Menelao convenciéndole de que había perdido el juicio.

Allí estaba Cristóbal de Rojas y Sandoval, prelado tan remiso en otra hora a otorgarle la licencia para fundar, esperándola a ella, a Teresa.

Tras exponer el asunto, la señora Dornell encontró a su marido tan remiso como siempre a dar una respuesta afirmativa a la carta de Reynard.

Dal detestaba que Rossky fuese tan remiso a ceder el mando de nada, incluso de aquellas áreas en las que el coronel tenía menos experiencia.