Pongámonos nuestras mejores túnicas y salgamos a recibir a mi viejo mentor.

Lamentó que su viejo mentor no hubiera sobrevivido para presenciar aquel momento.

En cuanto se marcharon todos, Caine se acercó a su viejo mentor.

Mi viejo mentor llevaba su habitual mono de trabajo y una camiseta.

Su viejo mentor habría dicho una frase diferente, pero con la misma intención.

Pocas personas podían hablarle al príncipe heredero como lo hacía su viejo mentor.

Kazimir chapoteó en el agua y cogió a su viejo mentor.

Sir Walter no tenía intención de mantener en vilo a su viejo mentor.

A Jaja le preocupaba mucho la actitud de su viejo mentor.

Habiendo obtenido todo cuanto necesitaba de su viejo mentor, Caedmon sacudió la cabeza.

Fitz alargó la mano para estrechar la de su viejo mentor.

Fue un agente en particular, el viejo mentor de Ravenor, el inquisidor Eisenhorn.

Pero mi viejo mentor, Simón, estaba en Roma, y deseaba volver a verle.

Vio a Minos, su viejo mentor fantasmal, llevándolo por el laberinto.

Anás se volvió con una sonrisa sarcástica a mi viejo mentor.

Habían transcurrido varios meses desde la última vez que habló con su viejo mentor.