Significados de gansada em espanhol

En cuanto hube pronunciado aquellas palabras comprendí que había dicho una tontería.

No deben su éxito más que a la tontería de sus víctimas.

Sin embargo, esto de predecir el futuro es, en principio, una tontería.

Cierto, es una tontería absoluta cuando se aplica al seguro del desempleo.

Inmediatamente Pluma tuvo la impresión de haber dicho una tontería nada interesante.

Se trata, evidentemente, de un disparate desde el punto de vista tecnológico.

Sin duda se trata de un disparate digno de la mismísima Inquisición.

Sinceramente, pese a tu buenísima intención, esa propuesta me parece un disparate.

En consecuencia no somos los trabajadores municipales los responsables de este disparate.

Es ridículo, un disparate; los mestizos tienen demasiado miedo; ninguno querrá participar.

Obviamente hay peligro de ataques terroristas, por la necedad de salafistas extremistas.

La necedad humana suele ser la causa de la mayoría de fatalidades.

Pero mi escepticismo ha resultado ser una necedad en no pocas ocasiones.

Eran unos necios, naturalmente; pero él solo no podía erradicar tanta necedad.

Quizá no era una cuestión de necedad y sí de mala idea.

Pensé que todo aquello era solo una buena dosis de idiotez romántica.

Mi abuela tenía razón: la televisión es un retroceso, una solemne idiotez.

Ignoremos la viabilidad del proyecto, cosa que habría sido una idiotez criminal.

El Gran Señor mataría a Miranna y se reiría de nuestra idiotez.

Maldiciendo su idiotez, rastreó entre sus pertenencias y desenterró las gafas viejas.

Algo lógico, por otra parte, dada la simpleza del procedimiento de imprimación.

Por la misma simpleza primitiva, podía también desobedecer sin motivo ni explicación.

Si te refieres a la simpleza del objeto, podemos estar de acuerdo.

Este punto de vista es, por desdicha, una exagerada simpleza, demasiado optimista.

Con los años, su simpleza se había hecho cada vez más evidente.

En realidad era una bobada sin mayor trascendencia, una observación de alcohólico.

Por supuesto que no; eso no era más que una romántica bobada.

Sin embargo, una bobada estuvo a punto de hacerle perder la compostura.

En su momento, Sully había considerado que esta idea era una bobada.

Yo le digo que me parece una bobada, pero efectivamente se retira.

El texto era una majadería: resultaba inadecuado y, hasta cierto punto, falso.

Esto es una majadería, pero podría colocarme en una situación sumamente embarazosa.

A esta debería llevarse el otro asunto pendiente: la majadería de Guanacaste.

Quiere que haga una confesión general ya boqueando ¿Habéis oído majadería semejante?

Puede que en realidad fuera una majadería todo lo que estaba diciendo.

En lugar de pedir semejante sandez, debieran pedir igualdad ante la Ley.

No es sino la consecuencia de una sandez del arzobispo de Toulouse.

Hasta Ribera debió de considerar aquello una sandez, porque cambió de tema:

Locura, sandez, sueño vano imaginar una cámara secreta en un palacio olvidado.

Mientras agitaba tal instrumento, cometió la sandez de dejarme los brazos libres.

Vestía con cierta fatuidad, lo que a primera vista no le favorecía.

Su fatuidad lo llevaba a justificar esta desigualdad, a considerarse un triunfador.

Cuando la vanidad está satisfecha y lo demuestra se convierte en fatuidad.

Entró, sentóse e infló los carrillos, tomando un aspecto de indescriptible fatuidad.

Bien; me quedé echado, enfrentado a mi propia cobardía y fatuidad -dijo-

La vaciedad de la política tiene efectos muy perversos para la sociedad.

La inútil vaciedad de aquellas palabras le ayudaron a calmarse un poco.

Bajo ese interés universal se oculta la vaciedad, el desinterés por todo.

También influía ese sentimiento de vaciedad que le impedía hacer muchas cosas.

La decisión de Galeb iba a producir en Fronesis una gran vaciedad.

Este asunto de dislate legislativo posee tal fuerza que traspasa nuestras fronteras.

Error suyo fue amarme; mayor dislate mío dar alientos a su afición.

Es por el mayor dislate que haya podido cometer el proyectado coordinador.

Regresar a Guam para desembarcarlo y liberarnos de él es un dislate.

Domicilio inexistente, paradero desconocido, lo que se te ocurra como tal dislate.

Está claro que todos nos sabemos existentes: se trata de una perogrullada.

Aquí cabe otra perogrullada: no basta ser honrado, también hay que parecerlo.

Es una perogrullada, pero Noruega no es Suecia, ni Dinamarca es Finlandia.

Los derechos humanos, aunque sea una perogrullada, son hasta ahora eso, humanos.

Perdona, se crean las que es posible crear, aunque parezca una perogrullada.

Quien acababa de hablar comprendió al punto la memez que había pronunciado.

A corto plazo dirán que es una memez, pero luego te encumbrarán.

Los sistemas de control están jodidos o alguna memez por el estilo.

Si fuesen realmente de izquierdas, el nacionalismo se les antojaría una memez.

Tras la muerte, la gente olvida la memez, pero recuerda el brillo.

Ésta es una región del mundo gravemente enferma de bobería y copianditis.

La bobería del año anterior con Sabitha empezaba a perderse de vista.

Ella representa en realidad la vida cotidiana, es bobería, prudencia, mezquindad, aburrimiento.

Todo eso es mentira, o en el mejor de los casos, bobería.

Acabemos con esta bobería, para celebrar ese nuevo galón donde Puchita Brazobán.

Lo que no entiendo es que se pueda creer en semejante patochada.

Kathy, aquí presente, piensa que tus animales son una absoluta patochada.

Decidida a no hacer otra patochada en cuanto a vestimenta, compró los dos.

Tenía gracia que un psiquiatra de la fama de Jover utilizase semejante patochada.

Esto es una patochada, una gente que ha perdido el norte.

Lo del boletín de notas es una fantochada, siempre lo ha sido.

Nadie mejor que él sabía la fantochada que había sido aquel encarcelamiento.

Afirmasteis que no habría problema, que esta fantochada no seguiría adelante.

Once contra siete, en un fangal como ése, era una fantochada.

Todo el mundo sabía que lo de sus mujeres cubiertas era una fantochada.

El esfuerzo intelectual se mal entiende como sosería, una cosa para aburridos.

El sujeto ya estaba harto de virtud y de aburrida sosería doméstica.

No le deseo la menor desgracia, pero soy incapaz de soportar la sosería.

Nosotros estábamos en pleno corazón palpitante de su sosería: demasiado lejos de Minneapolis-St.

Calitea no dejaba de reconocer esta sosería, pero estaba prendadísima de la muñeca.

Eso está bien algunas veces, ¡pero casi siempre es una mentecatez!

Sin embargo, aquella mentecatez podía dar lugar a consecuencias funestas.

Y en segundo, me parece una mentecatez perder el tiempo soñando con un imposible.

Cuando llegó, se encontraba en un estado transitorio de mentecatez.

Dígase si todo esto no es de una insigne mentecatez.

No creo esa tontuna de que Tamaros nos maldijera desde la tumba.

El ejercicio de la tontez o tontuna raramente es ocupación de dedicación exclusiva.

Ahora añoraba la felicidad y la tontuna que antes había detestado.

Les sobraban en cambio modales y aderezos finos, pretensiones, tontuna.

Fue lo que me volvió en mí y murmuré a su oído una tontuna.

Me niego en redondo a que rodees de publicidad una tontada como ésta.

Al menos, cuando hacía alguna tontada, resultaba que le tenía detrás.

Hice una tontada, pero la verdad es que asomé la cabeza y dije:

Una tontada -dijemientras me pasaba los dedos por el pelo.

Esta tontada, en concreto, con caligrafía dudosa, decía lo siguiente:

Resultan una ñoñez, bien mirados, teniendo en cuenta la multitud de beneficios.

Hay muchas fuentes de inspiración, casi todas salidas de mi propia ñoñez.

Ello los salva de la ñoñez y les presta un neto perfil literario.

Aliado de ella el Gran Cañón del Colorado hubiese parecido una ñoñez pequeñaja.

Ellos nunca decían "hacer el amor"; a Lawrence le parecía una ñoñez.

Eso por no abundar en auténticas mentecatadas que, según AP, declararon otros paisanos y que el reporte de marras deja correr sin matizaciones.

Cuando se ha combatido la tendencia de esta revista, se ha cometido la gedeonada de confundir a Europa con el extranjero.

Alfredo, Pepito y el hijo de la señora Luisita lo imitaban y pasaban el tiempo con estas gedeonadas.