Pueden amarnos y preocuparse por nosotros y sin embargo irritarse contra nosotros.

Dicen que Cambó tardó mucho en poder hablar del asunto sin irritarse.

Como nada de ello tenía sentido para Macon, estaba empezando a irritarse.

Aunque no podía evitar irritarse porque Fredrika no tuviera el mismo entusiasmo.

Nadie me presta atención, más que para irritarse levemente por mi paso.

No tenía tiempo para pensar en el dolor, ni energía para irritarse.

Pues si te atiende, le curarás y no hay necesidad de irritarse.

Pese a sus esfuerzos por permanecer tranquilo, Pedro estaba comenzando a irritarse.

Luis XI, lejos de irritarse por esta inconveniencia, añadió con cierta amabilidad:

Clara había dejado de irritarse por el tono de suficiencia de Gerardo.

Ya comenzaban esas pequeñas cosas que sus padres hacían para irritarse mutuamente.

Había empezado a irritarse con facilidad y estaba cada día más pomposo.

Ella pareció irritarse notablemente; colocándose las manos en las caderas, me espetó:

Mientras estás trabajando la piedra, ellos comienzan a irritarse y a murmurar.

Rebecca no pareció irritarse por esa frase que no venía a cuento.

Es mejor irritarse el paladar que quedarse sin defensas ante el recuerdo.