Significados de voracidad en español

Cada vez gana mayor presencia el debate antitaurino en los mensajes políticos.

Chevtsov hablaba de mala gana; omitía detalles sin duda del mayor interés.

Nadie gana con el debate mientras siga habiendo muerte en nuestro país.

El grupo trasciende la escena local y gana cierta fama en Europa.

Este argumento gana fuerza al observar lo que ocurre fuera de Francia.

Ayer era el apetito; hoy es la plenitud; mañana será la saciedad.

Detalles y siempre más detalles; Napoleón exhibía un apetito insaciable de detalles.

Hay muchas pirañas, candidatos con mucho dinero que tienen demasiado apetito político.

El sueño le había dado nuevas fuerzas; un apetito insistente lo agobiaba.

Mi respuesta a las preguntas anteriores es que el apetito está ahí.

No se puede seguir defraudando el ansia de cambio de los ciudadanos.

Y este deseo puede transformarse en ansia; entonces cualquier medio es aceptable.

Esperaba con ansia las elecciones para lograr un puesto en la Cámara.

Mi familia esperaba con ansia el momento de mi presentación en sociedad.

Hay en el ministerio varios señores que desean con ansia poder investigarlo.

Bebía sus palabras con tal avidez que únicamente podía comprender su sentido.

Quizás precisamente la riqueza y aquella cultura habían suscitado envidia y avidez.

Mucha gente en Europa leyó con avidez los relatos de aquellos viajes.

Sus células, de pasmosa eficiencia, deglutieron con avidez la rica sustancia radioactiva.

No era necesario racionar el agua; bebió de la cantimplora con avidez.

Parece que estamos ante un caso de gula tributaria: nada es suficiente.

Y algo semejante ocurre a menudo con nuestro sibaritismo y nuestra gula.

Pero todavía más importante que la gula era comportarse como verdaderos macarras.

Dominados por la gula, apenas cruzaron algunas palabras mientras satisfacían el apetito.

Para todo el mundo, la causa de su muerte sería su gula.

Un ejemplo de ello es la glotonería de su invierno en Thurii.

A pesar de ello, es muy difícil no ceder a la glotonería.

Naturalmente la glotonería de los monjes acarreó a la Iglesia cierto desprestigio.

Los santos no estaban indefensos, sin embargo; había penalizaciones por la glotonería.

En el siguiente círculo, el tercero, se encuentran los viciosos de glotonería.

Esta obra pretende ofrecer una visión realista y personal sobre la bulimia.

En la bulimia se producen atracones con comida varias veces por semana.

Pero, entre bastidores, drogas, alcohol y crisis de bulimia ensombrecían el retrato.

La anorexia y la bulimia habían entrado en sus vidas, estaba claro.

Hay personas que beben, se drogan, padecen bulimia o enferman de cáncer.

Al mediodía, también; Parece griego antiguo: la carpanta, y suena legendario, ¿verdad?

Eso de la carpanta debe de ser etrusco y no griego.

Ahora continuaba careciendo de escrúpulos, pero a cambio le dominaba una carpanta bestial.

Os apuesto, maese, que nacisteis pobre y carpanta fue vuestra compañera.

Tienes más hambre que carpanta en el més del Ramadam.

Acuciados por la gazuza, nuestros predecesores se resignaron a comer de todo.

Con tanto paseo y tanta Roma es fácil que entre gazuza.

Una mañana apurole la gazuza, se abotonó el raído uniforme, y paso a

De los demás, quienes más acusaban la gazuza eran los enanos.

Todos los que están en este lugar son bolingas con gazuza.

Tenía una gusa que para qué, pero no me atreví a entrar.

En fin fue sobre todo la puñetera gusa la que me inspiró prudencia.

Los gruesos cuerpos parecían monstruosos gusa nos, hinchados después de una larga inmersión.

A ti también, cuando tenías gusa, te daban la papilla, ¿no?

Y cuando te entre la gusa, ¡nada de ir a pillarte un bocata, tronco!

La relajación de los invitados se notaba más bien en su indisimulada tragonería y sus comentarios francos.

Ni palabra de su hambre, ni de la tragonería con que había comido, parando entre bocado y bocado lo justo para chuparse los dedos.

Había pintado, ¿no?, la glotonería de Nochebuena, la hora de medianoche consagrada a la comilona, la tragonería de los estómagos vaciados por los cánticos.

Mientras que un panecillo haciendo que abran la puerta de una panificadora es un acto simbólico de hambronería... ¡No lo volverá a hacer!