Poco pesquis y demasiado discretear sin base sobre la voluptuosidad de cargarse al prójimo.

Yo no he venido aquí a discretear ni a filosofar.

Luis y yo nos rezagamos para discretear un poco.

Ida y su acompañante continúan discreteando, pero en voz más confidencial.

De codo sobre la borda, una pareja elegante, ella virgen y soltero él, discreteaba.

Martha oyó un susurro cercano: unas mujeres discreteaban; una de ellas, en voz baja, decía divertida:

Han estado discreteando durante un buen rato.

Entretanto, Berenguer daba la impresión de ser ajeno e indiferente al problema y discreteaba aparte con algunos capitanes.

Apuestos jóvenes, ojerosos como Manfredo, pálidos como Chatterton, discretean con las niñas de retorcidos bucles y empinadas crinolinas.

A poco llega ella y discretea.

A las siete de la tarde los caballeros provectos se sacaban los hígados a la baraja o discreteaban en sus peñas.

Fe Segovia discretea un poco con el amigo de su padre, con el fiel acompañante, con el hipotético novio del pasado.

Allí estaban reunidos todos los epicúreos que poco tiempo antes hacían en Vaux los honores de la casa, discreteaban y hacían ganar dinero a Fouquet.